INFORMATIVO EXTRA VÍA LATINA 22
Todos, sin duda, tenéis ya conocimiento del fuerte terremoto que se produjo ayer por la tarde en la capital de Haití, Puerto Príncipe, y sus alrededores. Los daños son considerables, hay numerosos heridos y las autoridades anuncian que se espera un gran número de pérdidas humanas.
Muchos se han interesado por la situación de los miembros de la Compañía de María en aquel país, de los jóvenes en formación y de los laicos con los que trabajan. Aunque las comunicaciones son muy difíciles, hemos podido establecer contacto con Hervé Guillo du Bodan, SM, que es el Maestro de Novicios. Hemos hablado con él por teléfono desde Roma por la mañana temprano (hora local).
Las informaciones no son aún completas, pero esto es lo que hemos podido saber:
1. El terremoto se produjo ayer, martes, 12 de enero hacia las 5 de la tarde (hora local).
2. No hay que lamentar ningún muerto ni herido grave entre nuestros hermanos, nuestros novicios y prenovicios. Pudieron escapar de las casas, en algún caso saltando desde la ventana. Consideran un milagro el haber podido evitar daños personales.
3. El edificio del noviciado ha quedado totalmente destruido y el del prenoviciado, adquirido recientemente, está por el momento inaccesible, aunque la parte fundamental ha quedado en pie.
4. El P. Gustave Lamontagne, SM, de la Región de Canadá, que estaba visitando Haití, se encontraba fuera de la ciudad en el momento del terremoto. No tenemos noticias suyas pero, aunque persista la inquietud, parece que la zona del país en la que se encontraba no ha sufrido grandes daños. Este hecho se puede considerar como un segundo "milagro", ya que la habitación que ocupaba en Puerto Príncipe ha quedado sepultada por unas losas de hormigón.
5. Todo el mundo está viviendo en las calles ante la falta de seguridad de los edificios.
6. Por los contactos mantenidos con algunos miembros de las Comunidades Laicas Marianistas, creemos por el momento que todos han sobrevivido a la catástrofe.
7. El centro de la ciudad de Puerto Príncipe ha quedado prácticamente destruido. El Palacio Presidencial y la Catedral han quedado seriamente dañados. Se han derrumbado la mayor parte de las escuelas y, como se puede imaginar, los transportes, las comunicaciones y otros servicios vitales han quedado gravemente afectados.
Compartimos estas informaciones con todos vosotros porque son muchos los que habéis expresado vuestra preocupación y vuestra inquietud por los marianistas y por el pueblo de Haití en general.
Os exhortamos a tomar todas las medidas de ayuda y apoyo que podáis y, especialmente, os pedimos vuestra oración por este pueblo tan duramente castigado por una tragedia más. ¡Que el Señor y nuestra Madre consuelen a los que sufren en estos momentos de dificultad!
ADMINISTRACIÓN GENERAL- COMPAÑÍA DE MARÍA