Construcciones poéticas a las que Parra llama Artefactos, son dispositivos poéticos puestos en escena. Son antipoemas, pues también son reescrituras controladas por operaciones de homologación, inversión y satirización.
Su temática es amplia y cambiante según el estado de la sociedad y la forma extrema de los artefactos son los “trabajos prácticos”, en que la imagen de éstos es sustituida por un objeto muy bien seleccionado por un posible simbolismo y la tarjeta por un soporte físico para soportar el conjunto del texto verbal y objeto.