Septiembre, mes de oración por Chile, mes de la Patria. Los cristianos aspiramos a una patria común con todos los seres humanos que es el Reino de Dios. Patria futura pero al mismo tiempo presente entre nosotros como nos dijo Jesús. Patria que se caracteriza por las relaciones de amor, de justicia y misericordia entre los que la integran. Trabajar por ello es la mejor manera de hacer patria. Todo lo que vaya en contra de la sana convivencia, del respeto mutuo, de la solidaridad o de la superación de la inequidad atenta contra la Patria. Si de verdad queremos que septiembre sea el mes de oración por Chile tendríamos que alabar al Señor intentando seriamente presentarle acá en Chile una sociedad que pretende y se esfuerza en ser reflejo de su amor. Al mismo tiempo, darle gracias por tantas personas que ha puesto en nuestro camino que nos aman y a las que amamos. Agradecerle por los muchos gestos solidarios de los que hemos sido testigos en agosto, mes de la solidaridad. Pedirle para que seamos todos felices en el mundo en general y en el contexto humano en el que nos ha hecho nacer y vivir. Rogarle que nos ayude a superar nuestros pequeños o grandes egoísmos, tanto a nivel personal, familiar o social.