¿Cuál es la misión de esta obra educativa?
Casa Estudio Chaminade es una pequeña parte de la Iglesia y de la Familia Marianista. Nuestra inspiración/misión en el trabajo nos viene de la plegaria eucarística que dice: "Danos entrañas de misericordia frente a toda miseria humana. Inspíranos el gesto y la palabra oportuna frente al hermano solo y desamparado. Ayúdanos a mostrarnos disponibles ante quien se siente explotado y deprimido. Que tu Iglesia, Señor, sea un recinto de verdad y de amor, de libertad, de justicia y de paz, para que todos encuentren en ella un motivo para seguir esperando. Que quienes te buscamos sepamos discernir los signos de los tiempos y crezcamos en fidelidad al Evangelio; que nos preocupemos de compartir en el amor las angustias y tristezas, las alegrías y esperanzas de todos los seres humanos, y así les mostremos tu camino de reconciliación, de perdón, de paz..."
Fruto de esta reflexión nuestra misión es "brindar un espacio de educación básica no formal de calidad, gratuita e inclusiva, a niños y jóvenes desertados del sistema de educación formal de la provincia de Linares". En la pasada visita del Papa Francisco a Río de Janeiro, hemos sentido renovada nuestra misión al dirigirse a los jóvenes en riesgo social diciendo "la Iglesia no les deja solos y que tienen que luchar para que no les roben la esperanza". Y es en esta tarea que nos encontramos, acompañando a muchos jóvenes, devolviendo su dignidad y esperanza.
¿Cuál es el perfil de los alumnos que atiende?
Los niños y jóvenes que llegan a estudiar con nosotros pertenecen en su mayoría al primer quintil. Dentro de sus características podemos señalar que un buen número ejerce trabajo infantil, presentan un desfase escolar promedio de 3 años. La mayoría proviene de sectores vulnerables y rurales. Un buen número de apoderados no tienen un trabajo estable, sino más bien de temporada por ser una provincia agrícola, siendo los meses de invierno los de mayor necesidad material en muchas familias.
Otras características de estos alumnos y en mi criterio las más importantes, es que son niños y jóvenes talentosos, con un corazón profundamente solidario y con deseos de ayudar a los demás. Niños y jóvenes que a pesar de sus dificultades no pierden la alegría y capacidad de enfrentar la vida y no rendirse ante un sistema excluyente y discriminador. Podemos señalar que son personas resilientes. Jóvenes que ante las oportunidades que ofrecemos intentan responder, descubriendo sus talentos y habilidades. Jóvenes que viven sus limitaciones como oportunidades para el cambio. Jóvenes que han sido estigmatizados por su procedencia, modo de hablar, de vestir y que a pesar de ello, se quieren integrar socialmente. Niños y jóvenes cariñosos, que aman y se dejan amar cuando encuentran a alguien que los cuida y ama.
¿Qué formación y habilidades tienen los educadores que trabajan en Casa Estudio?
El principal requisito para formar parte del equipo es tener una vocación cristiana y marianista de la vida y de compromiso auténtico con los niños y jóvenes desertados del sistema de educación formal. El equipo es integrado por profesionales y técnicos con experiencia en el trabajo de promoción y educación en contextos vulnerables. Entre todos formamos un equipo que brinda cariño, contención y un proceso de intervención que busca restablecer la dignidad arrebata en algunos casos. Trabajar en Casa Estudio Chaminade implica una ascesis profesional de renuncia a un lugar cómodo, seguro y tranquilo, por un lugar desafiante, que despierta la pasión y el compromiso en todo momento. Trabajar en este ambiente implica una vocación especial, donde cada día morimos a nosotros mismos por brindar lo mejor a nuestros alumnos y alumnas.
¿Cómo ha evolucionado en estos años de funcionamiento?
Los inicios de Casa Estudio Chaminade, se sitúan en el año 2009 donde nos ubicamos en el sector Nuevo Amanecer, en una sede social facilitada por la Municipalidad de Linares. Los comienzos como toda obra nueva son desafiantes y exigieron por parte del equipo un mayor compromiso y deseo de ofrecer lo mejor de cada uno. Al cabo de tres años de ejecución surgió la posibilidad de trasladarnos a una casa ubicada cerca del centro de la ciudad, facilitando una mayor asistencia de los alumnos provenientes de las comunas de Yerbas Buenas, Colbún, Longaví y Linares.
Hoy contamos con una matrícula de 65 alumnos y alumnas, 35 en procesos de reinserción en la educación formal u otras modalidades educativas en enseñanza media.
¿Cuáles son los planes de futuro?
Los planes a futuro y para ello estamos trabajando día a día es transformarnos en un colegio que responda a las necesidades especiales de estos alumnos. Actualmente integramos una red de educación no formal, donde participa Unicef, Fundación Súmate, Asociación Chilena de Municipalidades entre otras instituciones, con quienes cada quince día nos reunimos para instalar esta problemática en las políticas públicas del país. En este proceso hemos sostenido reuniones con parlamentarios de todos los sectores, miembros del Ministerio de Educación y todos aquellos actores relevantes a la hora de legislar una nueva reforma educacional.
Esperamos en el corto plazo contar con una obra educativa reconocida por el Estado y ser sujetos de todos los beneficios de un colegio formal. Necesitamos urgentemente tener asegurada la alimentación vía JUNAEB, contar con la tarjeta estudiantil, entre otros muchos beneficios que hoy nuestros alumnos no cuentan por estar fuera del sistema educacional.
¿Cuáles son tus sueños como encargado de la obra?
Como animador de esta obra sueño con un centro educativo que permita a cada joven cumplir sus deseos y ayudar a descubrir su proyecto de vida. Quisiera que esta obra esté incorporada en las preocupaciones y prioridades de la Familia Marianista, que se transforme en el corazón de la solidaridad de nuestra familia. Como obra nueva necesitamos que todos se sientan parte y protagonistas.
Para el Padre Chaminade la educación es el medio privilegiado para el desarrollo de las personas, y vemos en el padre fundador su interés y preocupación por los más excluidos, en sus constantes visitas a la cárcel de Burdeos, el trabajo con las prostitutas y los niños limpiachimeneas. Sin duda que Casa Estudio Chaminade es un fruto de la espiritualidad marianista, una espiritualidad llamada a ilumina la vida de los seres humanos sin excepción.
Finalmente, quisiera invitarlos a que nos busquen en Facebook, y nos encontramos en las páginas web de la Familia Marianista: www.marianistas.cl / www.fundaciosinergia.cl . Es en estos lugares donde pueden encontrar mayor información.