Muy emotiva y cargada de buenos deseos para nuestros jóvenes de 4º medio estuvo la Eucaristía de despedida, celebrada el 11 de noviembre en la Parroquia San Miguel Arcángel, que fue presidida por nuestro capellán p. Enrique Bielza. En esta celebración en que damos gracias a Dios por nuestros estudiantes, la vida compartida entre sus pares y con los que pertenecemos a la institución; se les invita a seguir sembrando en otros, valores y dones reforzados durante su permanencia en nuestro Colegio.

Durante la Eucaristía también se reconoce la labor que los estudiantes han desarrollado durante su estadía, en el área Pastoral; siendo animadores del Movimiento Faustino, Catequistas de sus compañeros menores, delegados de pastoral de sus cursos. Y a los padres que han apoyado en el área pastoral.

El momento final estuvo lleno de sentimientos de gratitud y emoción, así lo expresaron quienes nos ayudaron a dar gracias a Dios.

“Hoy es un día muy especial para nuestras familias y queremos agradecer por el camino recorrido, por el crecimiento familiar que hemos tenido durante estos 13 años siendo parte de esta gran familia. Agradecemos y bendecimos este camino que nos hizo crecer en comunidad y que enriqueció nuestra fe, nos inspiró como padres que con orgullo vemos egresar de este colegio a nuestros hijos. Gracias, por lo aprendido, por lo soñado y vivido, por la emoción y el sentimiento de compartir en comunidad este momento en que hacemos el envío de nuestros hijos.

Gracia por los amigos que hicimos para la vida, amigos nuestros y de nuestros hijos” (Catalina Duarte, delegada de pastoral 4to Medio A)

 “Damos gracias a Dios y a la vida por tener la oportunidad de vivir como familia esta gran aventura. En esta etapa de sus vidas, nuestro colegio, su colegio, fue un lugar donde muchos conocieron y vivieron el significado y la trascendencia de valores, como el amor, la amistad, la lealtad, la compasión, la caridad cristiana, el cariño por su país, el respeto por la diferencia, la alegría y también la tristeza.

Agradecemos a Dios porque, entre tanta incertidumbre vividas en este último tiempo, ustedes nos regalaron la posibilidad de ver jóvenes felices, con ganas de recuperar el tiempo perdido, llenos de proyectos, conscientes de sus privilegios, y de las obligaciones que estas imponen, respetuosos de las normas de convivencia en sociedad, solidarios optimistas y entusiasmados…” (Ximena Poblete, Educadora de Párvulos)

Pedimos al Señor de la vida que acompañe el nuevo camino de cada uno de estos estudiantes, y que en su vida continúen mostrando a los otros su espíritu de servicio, bondad y honestidad que los caracteriza, en cada lugar donde se desempeñen.