Hemos compartido la vida, viviendo momentos de mucha tristeza como la partida de dos integrantes al encuentro del Padre, cuyos testimonios de fe calaron profundo en nuestro corazón. Así también se han sumado nuevos miembros, que nos han dado nuevos impulsos y recargado las energías, los últimos en sumarse son un matrimonio de hermanos venezolanos muy marianos, con un compromiso y entrega dignos de imitar.
Asesorados por la Hna. Carmen fuimos avanzando en este caminar, de la mano de María hemos tratado, no ajenos a dificultades y contratiempos, de seguir los pasos de Jesús, cultivar sus virtudes y ser testimonio de su amor en el entorno que nos toca vivir a diario, motivados siempre con el testimonio de nuestros fundadores.
Los días 28 y 29 de mayo viajamos a una pequeña localidad llamada Rancura, tal como lo hicimos años anteriores a la pandemia, para realizar una jornada de reflexión, oración y amena celebración. Afortunadamente pudimos estar casi todos, menos el tío José, por problemas de salud, no ha podido sumarse a nuestros encuentros. Recorrimos estos 20 años con videos y recuerdos de nuestras actividades y de la Familia Marianista de Talca; retiros, jornadas, misiones, celebraciones, etc.
Con la gracia de Dios culminamos el fin de semana con un llamado telefónico a España, pudiendo hablar con la Hna. Carmen y también participando en la Eucaristía de la capilla San Pedro, con don Emilio ministro del lugar y su señora, que siempre nos reciben con mucha alegría y entusiasmo. Renovados en el espíritu, sabemos que tenemos una gran misión por delante, dar a conocer a Jesús al mundo y hacer que muchos más le amen.
Angélica Parraguez
Animadora Comunidad San José Carpintero