La Comunidad Escolar agradece la presencia de nuestro pastor Monseñor Francisco Javier que nos acompañó, agradecemos su noble misión la que le ha llevado a guiar con sabiduría, paciencia y mucha paz a la Iglesia de la que este colegio y cada uno de nosotros somos parte. Al aceptar la invitación nos privilegió como familia y en su figura acompañada de los sacerdotes marianistas nos reencontró con quienes iniciaron este sueño educacional Monseñor Miguel León Prado en 1885. El Cardenal en su homilía extendió su saludo y agradecimiento a los párrocos quienes fueron Rectores a lo largo de la historia, la de los sacerdotes carmelitas, la de los docentes que han hecho historia, las religiosas ursulinas y hoy desde hace treinta y tres años la de la Compañía de María. El Cardenal Arzobispo es parte de la Memoria Histórica que sólo verdaderos hombres logran construir.
Señor Jesús, al atardecer de un día tan hermoso de 29 de Septiembre nos reencontramos en el amanecer que nos brindan las familias de nuestro CPSM. Gracias por la presencia de cada padre y madre y sus hijos e hijas que nos confían y comparten esta digna tarea de educar. El Colegio Parroquial nace de la generosidad y el testimonio de un matrimonio católico, la misma actitud con la que tantas familias nos privilegian y nos llenan da Amor. Hace 125 años comenzó el Sueño de Educar, la Pasión de Vivir, la Misión de Formar niños y niñas en una historia católica. En 1885 nació el Compromiso de Fortalecer una patria con jóvenes que lideren con espíritu solidario, sin ambiciones, cada rincón que habiten.
En el año 2010 mirando al futuro, con espíritu de familia, desde la visión de tantos ex alumnos y con la experiencia de la historia compartida, trabajando por una educación de calidad, convencidos que nuestra labor debe ser en equidad, generando hombres y mujeres al servicio de la justicia y la paz y sabiendo que en tierra firme y en tiempo joven el Colegio Parroquial San Miguel seguirá viviendo lo que cree y creyendo en la persona de Jesús y María. Así por todo el camino construido y la tierra que nacerá, hoy damos, Gracias Señor.