En la sede del Colegio Marianista de Buenos Aires se llevó a cabo el tercer encuentro de los responsables de la Fundación Chaminade y del Instituto Cultural Marianista. Los objetivos del encuentro fueron los siguientes:
Por la Fundación Chaminade participaron: el P. José M. Arnáiz, sm; las señoras Liliana Bravo, Inés Morales, Ma.Eliana Rebolledo, Alicia Navarrete; los señores Jesús Gómez, sm, José Pascual, sm, Ricardo Cáceres, Jorge Figueroa, Rodrigo Urrutia.
Por el ICM participaron el padre Luis Casalá, sm y el padre Andrés Tocalini, sm; las señoras María Angélica Belloni, Luisa de Leonardis y Marta Mollier; los señores Arturo Pérez, sm, Marcos Romero, Gustavo Sanmarti, Gustavo Magdalena. En la última jornada nos acompañó el señor Enrique Martín.
El encuentro comenzó con una memoria de la vida de las dos entidades en el último año. El señor Jorge Figueroa presentó los grandes temas de la Fundación Chaminade entre mayo de 2009 y abril de 2010, entre ellos:
A continuación, el padre Andrés Tocalini, sm, como socio del ICM presentó lo realizado por el Equipo de Animación en 2009 y lo proyectado para 2010, siendo éste un año de evaluación de la tarea de dicho equipo.
Tras este pantallazo por la vida de las entidades, el programa de trabajo del encuentro se estructuró en base a dos grandes ejes:
1º) El Bicentenario y la formación de competencias ciudadanas
2º) El aprendizaje servicio y la educación para el servicio, la justicia y la paz.
Los Bicentenarios de la independencia nos enfrentan con los temas pendientes para nuestras sociedades: la desigualdad, la pobreza, las voces no escuchadas... El anclaje democrático que asumimos para este siglo nos obliga a revisar cómo se procesan y resuelven los conflictos, cómo se acepta y valora la diversidad y la pluralidad de nuestras sociedades. El individualismo no puede hacernos olvidar que la Nación es una tarea y que debemos conformar una mesa para todos los ciudadanos, todo lo cual nos lleva a reflexionar sobre la dimensión colectiva, lo público, la categoría de "pueblo". El licenciado Darío Pulfer, director de la oficina Buenos Aires de la Organización de Educación Iberoamericana (OEI) nos ayudó a discernir el Bicentenario desde una re-lectura de la Historia, en clave democrática y de integración latinoamericana, al tiempo que nos presentaba a la educación como una herramienta imprescindible para el desarrollo de nuestros pueblos. En este marco, el objetivo de las Metas 2021 puede ser orientador. El Bicentenario no es una fecha conmemorativa y nada más, sino un proceso de reflexión, identificación y compromiso con nuestras Patrias.
Un camino posible y enriquecedor para fortalecer los aprendizajes y generar ese compromiso es el Aprendizaje Servicio. La profesora María Nieves Tapia, directora del Centro Latinoamericano de Aprendizaje y Servicio Solidario (CLAYSS) describió los ejes conceptuales en los que se asienta dicho enfoque. Supone una forma de organización basada en proyectos e integración de áreas; una lectura profunda de la realidad y desde las necesidades organizar el servicio; donde los pobres no son destinatarios, sino "co-protagonistas". Cuando lo social se encara en profundidad desemboca en el compromiso y en la participación política. Desde una perspectiva marianista, la acción y el servicio deben tener una impronta espiritual (la Encarnación, el mandamiento del Amor, ver a Cristo en cada uno de los hermanos) y el Aprendizaje Servicio puede ayudarnos a vincular más estrechamente dichas acciones con los procesos de aprendizaje en las aulas, favoreciendo auténticamente una educación integral de calidad.
Con este telón de fondo (el Bicentenario) y esta perspectiva pedagógica (Aprendizaje Servicio) abordamos una serie de problemáticas importantes, donde se juega buena parte de nuestra misión educativa:
En definitiva, nuestros colegios deben tener en claro que quieren formar personas que configuren un futuro mejor para nuestros países. Debemos centrarnos en estos objetivos, porque son los importantes, los decisivos, aunque a veces lo urgente nos los hace relegar. Generar un ambiente de compasión, donde la diversidad se asuma como riqueza y los aprendizajes resulten significativos. Que sepamos trabajar en red y nos orientemos por verbos tan centrales como "creer", "crecer", "compartir".
La evaluación del encuentro resultó muy positiva y se recordaron próximas instancias de encuentro en 2010 para educadores marianistas argentinos y chilenos: la reunión de directivos marianistas de Chile (Pejerrey, agosto); el Congreso Pedagógico Marianista (Buenos Aires, septiembre); el Congreso de Educación Marianista (Santiago, octubre).